Entradas

Mostrando entradas de septiembre, 2019

Quien a hierro mata (peligro de spoiler)

Imagen
Hoy celebraremos el #DíaMundialDeLaPersonasDeEda d y el próximo día 10 el #DiaMundialDeLaSaludMental.  Lo cual me ha recordado la película que vi hace no mucho; Quien a hierro mata , con el inconmensurable Luis Tosar interpretando un enfermero de un centro residencial de personas mayores.  Se viene reflexionando acerca de cómo el heteropatriarcado también empapa la narrativa de la industria del cine.  Denunciando y dejando de lado a la vez los abyectos casos de acoso y violación. Podemos observar como los papeles protagonistas son para varones, las historias le suceden a varones y la resolución de la trama suele tener un tinte... masculino. Es decir, podríamos llegar a afirmar que incluso la propia estructura; introducción, nudo y desenlace es una narrativa falocéntrica, cuanto menos por aquello de la introducción...  Bromas aparte. Salvando contadas excepciones, como por ejemplo: Icíar Bollaín o Isabel Coixet, como ya explicamos en nuestra antigua entrada "Los Goya, l

Sordos, que no tontos.

Imagen
Tenemos la suerte de vivir en un país en el que conviven muchas lenguas oficiales. Desde el punto de vista sanitario, el derecho a ser atendido dentro de la comunidad autónoma en cualquiera de los idiomas oficiales que coexisten, es ya una realidad. Tanto, que la estructura de los sistemas sanitarios ha cambiado. Para poder hacer uso de ese derecho, se están perfilando, a un determinado nivel lingüístico, casi el 80% las plazas que salen a concurso, en el País Vasco al menos.  Aunque muchos crean que esto no responde más que a un asunto político, la realidad es que debería solo responder a un asunto única y exclusivamente de autonomía e intimidad del paciente y riqueza cultural.  Desde mis propias carnes lo he vivido y aunque ha sido duro, adaptarse a la situación lingüística es una prioridad que debería estar apartada de radicalismos y politiqueos que nubla todo aquello positivo que puede exprimirse de esta realidad. Sin embargo, y visto mi afán por mostrar aquellos camino

Conectando con la vida

Imagen
Siempre que hablo en cualquier contexto: familiar, amigo o sanitario acerca del suicidio me viene a la cabeza (imagino como a todas las personas) la prevención. El ¿podría haberse evitado?, ¿podría haber hecho algo? Antes de meternos en materia, no quiero perder la oportunidad de daros, una vez más, el teléfono de la esperanza, si necesitas ayuda o alguien que conoces la necesita. 717 00 37 17 Teléfono de la Esperanza Horario: 24 horas al día, 7 días a la semana Idiomas: español Sitio web: telefonodelaesperanza.org Según la OMS, el suicidio figura entre las 20 causas de defunción más importantes a todas las edades a nivel mundial. Cada año se suicidan casi un millón de personas. Cada 40 segundos se suicida una persona en el mundo. Cada 40 segundos. Estos datos, si los desconocías, impresionan. Algunos factores de riesgo identificados son: las enfermedades mentales, principalmente la depresión y los trastornos por consumo de alcohol; el abuso de sustancias, la violencia

El chocolate y la felicidad

Imagen
Me encanta el chocolate. Comería todos los días, a todas horas. Cuando estoy enfermo lo único que me apetece comer es chocolate. Si estoy demasiado cansado para cocinar, un trozo de chocolate es más que suficiente para matar el hambre y meterme en la cama con una sonrisa. Son muchas las conexiones que el chocolate tiene con mi infancia. El Cola-Cao por las mañanas, el chocolate con pan o la Nocilla para merendar, el chocolate con churros los días de fiesta, las tartas de chocolate en los cumpleaños, las monedas y hasta los cigarrillos de chocolate eran fundamentales para los niños de mi generación.   No soy el único que recurre al chocolate al final de un día difícil o cuando la vida trae una temporada con el viento en contra. Buscando los motivos por los que el chocolate tiene ese poder encontré algunos datos curiosos. Resulta que el chocolate contiene una molécula llamada Anandamida (N-arachidoniletanolamina), un lípido que se une a los receptores

Doctor, sin informacion consentida por favor.

Imagen
Voy a ver como escribo sobre esto sin soltar una chapa sobre bioética que todos estamos hartos de estudiar una y otra vez para las oposiciones pero de lo cuál nunca me ha caído una pregunta de examen. Los cuatro principios básicos de la bioética rigen o deberían regir nuestro día a día. De esos 4, el principio de beneficencia es el que más presumimos de cumplir y en los últimos años aunque hemos avanzado increíblemente en el principio de autonomía aún nos queda un camino por el cuál dudo que hayamos avanzado. Esto hace que ambos principios, o mejor dicho, su aplicación se contradiga. Cuando se trata de hacer lo mejor para el paciente y actuar en su beneficio, hay dos situaciones que, si bien parecen estar bien reguladas, a mi me rechinan cada vez que me las encuentro y que cada vez que opino sobre ellas se genera controversia. Caso 1: mire, es que, le voy a derivar al hospital universitario pues aparece algo en las radiografías que no se muy bien qué es y habría que hacer