Nos quitan el negocio.

Tras el bombo y platillo que se ha dado a las protestas por el mal llamado RD de Prescripción Enfermera pasan las semanas sin el esperado golpe de efecto que revocase, anulase o metiese fuego a dicho RD (o en su defecto implementase las guías y/o líneas de actuación que favoreciesen el cumplimiento del mismo).

Así que una vez más parece que como en el siglo XIX sigue predominando por parte de algunos la idea de que la enfermería cumple bondadosa, servicial y metódicamente su función sin alterar la vida política mucho más allá de pequeños corrillos de enfermeras indignadas (ahora también en twitter). De tal manera que con el simple y mero pasar del tiempo las aguas vuelven a sus cauces y las reivindicaciones quedan aplazadas dónde habita el olvido.

(Minutos musicales) 

Pues bien mientras que por ese lado nos encontramos con un muro difícil de franquear. Por otro lado nos encontramos con una iniciativa que se llama "Congreso del Bienestar". Iniciativa apadrinada por la Cadena Ser y en el que participan grandes y respetables profesionales de la filosofía, teología, psicología, coaching, dibujantes, artistas y gentes del buen vivir. (Juan Echanove es uno de ellos y no consigo quitármelo de la cabeza).

El caso es que el programa consta, entre otras actividades, de conferencias de Ayurveda, Yoga, Sabiduría Oriental...etc.

Y me pregunto, desde la perspectiva de la prevención y promoción de la salud, cuánta Educación para la Salud se podría hacer en el contexto del bienestar. Cuánto tendríamos que decir como agentes activos de salud y de bienestar.

Y en otro sentido, por qué la Cadena Ser patrocina, no ya sin complejos, sino con orgullo una iniciativa que beneficie a la población y que incentive "la buena vida" y desde el estamento sanitario vemos con prudencia científica no aventurarnos en según que cosas sin el lógico y necesario aval de evidencia que sirva de apoyo teórico a nuestra práctica.

En definitiva, mientras cumplimos con los cuidados en los diferentes niveles de nuestra profesión, a la vez en la sociedad civil se llevan a cabo toda una serie de actividades que podríamos denominar en el límite o al margen de la ortodoxia sanitaria pero a su vez con gran tirón mediático/comercial y estará por ver con cuanto beneficio en la salud y bienestar de las personas. 

Así que ¿debemos desempolvar nuestras consultas, despachos y lugares de trabajo para buscar más y nuevos horizontes en los cuidados de las personas y aventurarnos en ir en búsqueda de nuevos horizontes? o ¿debemos continuar cumplidoras en nuestra profesión, que dicho sea de paso sin  apenas conseguir un ratio enfermera/paciente digno y ocuparnos de mejorar tantos y tantos aspectos que aún nos faltan de desarrollo profesional?

Y las dos a la vez. Ánimo con ello.